Estamos en plena temporada de cerezas, una fruta deliciosa con la que además de disfrutar con su sabor podemos confeccionar cojines terapéuticos aprovechando sus huesos.
La característica principal de los huesos de cereza es que acumulan mucho calor y lo liberan lentamente, con lo cual usándolo en forma de cojín, podremos aplicarlo en múltiples zonas del cuerpo en las que tengamos lesiones o dolores. Además gracias a su forma esférica y granulada podremos realizar masajes circulares.
¿Cómo hacer los cojines?
El primer paso será hacernos con huesos de cereza, podemos comprarlos por internet ya limpios, o bien guardarlos nosotros mismos. En éste caso os vamos a enseñar cómo limpiarlos:
Los coceremos con agua y vinagre y después retiraremos cualquier resto con un cepillo. Tras ésto los dejaremos secar en una superficie plana extendiéndolos de forma que no queden amontonados.
Ya sólo nos queda elegir la tela que más nos guste y rellenar el cojín, pero no totalmente. Los huesos tienen que tener movilidad. Os aconsejamos utilizar velcro para el cierre del cojín ( o una cremallera con todo el mecanismo de plástico), ya que así lo podréis lavar cuando sea necesario.
¿Cómo utilizarlo?
Para utilizarlo en caliente: (dolores muculares, cólicos, dolores de cuello y espalda, artritis)
Meteremos el cojín en el microondas a potencia media (600W) durante un minuto, transcurrido ese tiempo lo sacaremos, moveremos los huesos un poco y lo volveremos a meter otro minuto. NUNCA dejar el cojín dentro del microondas sin vigilancia ya que podría quemarse la tela si está mucho tiempo.
El cojín caliente libera un olor muy agradable, pero si además aportamos otras plantas aromáticas secas, podremos utilizarlo como aromaterapia.
Para utilizarlo en frío:(inflamaciones, fiebre, ojos hinchados, dolor de muelas)
Meter el cojín en el congelador entre 2 y 3 minutos.
Si no dispones de mucho tiempo o por cualquier otro motivo no puedes hacer tu propio cojín, pero te gustaría tener uno, ponte en contacto con nosotros.
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